Cuando invertimos tiempo en atender a nuestra niña interior todo fluye de mejor manera en nuestra vida. La Luna en Aries se está uniendo a Marte, Lilith y Eris, lo que nos da la mezcla perfecta para que, lo queramos o no, la niña que se manifieste a través de nosotras sea la que aún sigue herida y encuentra en la rabia y el enojo una válvula de escape.
Sin embargo, no tiene porque ser así. La niña herida sale cuando no atendemos bien a nuestra niña interior. Una forma de hacerlo es dejando que se exprese desde su lado creativo, y desde aquello que la hace única.
Y lo más importante, darle amor. A veces se nos olvida que a la edad que tenemos somos nuestra propia mamá y papá, en el sentido que podemos hacer lo mejor posible para nuestro bienestar. Somos nosotras las que decidimos que hacer con nuestra vida.
El día de hoy nutramos a esa niña que habita dentro nuestro. Démosle atención. Puede ser que lo que quiera sea descansar, o hacer algo que ama, o comerse un helado, bailar sin parar, comer palomitas…etc.
Y si a pesar de todo, un dolor se presenta, también debemos atenderlo, en la forma que sea. Reconocerlo es importante, porque sólo así podremos más adelante trabajarlo y sanarlo. Al final no es bueno ni malo terminar enojadas y peleando.
Es solo parte de lo que necesitamos vivir, y si la herida se deja ver es muy bueno porque nos permite ver lo que necesitamos sanar.
Bendiciones cósmicas.